Ante la proximidad de las fiestas de fin de año, los integrantes de AITA queremos saludar a toda la familia aeronáutica en particular y a todos los trabajadores en general, y desearles un próspero 2011. Pero también, como ocurre a esta altura del año en el que suelen realizarse los inevitables balances y proyecciones, queremos compartir con ustedes algunas conclusiones y también algunas propuestas para el año entrante.
Consideramos que para los trabajadores de APA ha sido un año bastante duro, principalmente para los que trabajamos en sectores como los de atención al público, tanto en aeropuertos como oficinas comerciales, en la rampa, cargas, y hangares, como consecuencia de la “regionalización” del Aeroparque, por el cierre de este último por refacciones, o por la falta de personal a lo largo de casi todo el año, lo que provocó una gran sobrecarga laboral y como consecuencia de ello, muchos compañeros accidentados o que enfermaron. Ninguno de estos puntos fueron tratados con la importancia que merecen por la dirigencia de APA, yendo incluso a contramano del resto de los sindicatos aeronáuticos que además del aumento, han conseguido importantes mejoras en lo que a condiciones laborales se refiere, dejando pasar una vez más, una oportunidad histórica para recuperar algunos puntos convencionales perdidos durante el menemismo. También los despidos injustificados y la persecución gremial desatada sobre algunos sectores, como lo vienen denunciando compañeros de Tráfico Aeroparque, es otro de los aspectos más serios y preocupantes que nos quedan de este 2010 y que muy fuerte tendremos que seguir trabajando para frenar esta embestida que la empresa, en complicidad con la conducción de APA, lleva adelante contra quienes exigen mejores condiciones laborales. Por otra parte, 2011 será un año electoral y el tema Aerolíneas será parte de la agenda política. Y sabemos que hay grandes sectores de la sociedad y varios partidos que quieren la reprivatización de Aerolíneas – Austral, y si a ello le sumamos los “desaciertos operativos” y cierta incapacidad para evitar conflictos evitables (como por ejemplo el de Rampa Aeroparque en el mes de julio, que generó otro caos operativo por falta de personal) en los que el directorio tiene una responsabilidad indelegable, esos sectores encontrarán motivos de sobra para justificar sus intenciones privatistas. Para evitar tantos descalabros y neutralizar así a los que quieren que la empresa vuelva a manos privadas, se debe poner en funcionamiento una comisión de trabajadores y usuarios que trabaje en el control y gestión de las políticas empresarias.
Por todo ello, es que junto al deseo de felices fiestas, llamamos a quienes queremos una Aerolínea de bandera estatal para beneficio de trabajadores y de la sociedad en general, a unirnos y redoblar el esfuerzo para concretar nuestro objetivo. ¡¡¡Salud y mucha fuerza para que nunca se apague ese deseo por seguir construyendo una sociedad más solidaria y más justa, es nuestro principal deseo para todas y todos!!!
A.I.T.A.
Agrupación Independiente de Trabajadores Aeronáuticos
